Hormiga Argentina (Linepithema humile)
Esta hormiga ha hecho que nuestro país sea particularmente recordado en todo el mundo. No por su belleza como insecto, sino por su agresividad y capacidad invasiva sobre otras especies de hormigas e insectos autóctonos de distintos países del mundo. Lo más llamativo de esta especie es la gran capacidad de asociarse entre distintas colonias generando hormigueros de tamaño inmenso. El último reporte en Australia citó un hormiguero de 47 hectáreas de dimensión.
La hormiga argentina es nativa de nuestras tierras. Es un insecto perteneciente al orden Himenópteros, con un fuerte comportamiento social, divididas en castas y agrupadas en colonias fundamentalmente femeninas. Muy conocida en el mundo por sus características agresivas sobre especies autóctonas. Realizan hormigueros asociativos de gran tamaño y desplazan con facilidad a otras especies de hormigas u otros insectos. Morfológicamente se las reconoce por ser pequeñas (2 milímetros las obreras y hasta 4 milímetros la reina) y color marrón claro. Poseen antenas geniculadas de 12 segmentos o artejos, carecen de espinas dorsales a nivel del tórax, y su pecíolo abdominal esta formado por un segmento poco visible. Pese a poseer aguijón, no se encuentra expuesto, difícilmente estas hormigas piquen. Su reproducción es sexual y la fecundación de las hembras ocurre una vez que han copulado con los machos durante el vuelo nupcial ocurrido luego del período de enjambrazón. Las hembras paren huevos de los que emergerán larvas. Luego de transcurridos tres estadios larvales se formaran las pupas que dan origen a los adultos una vez que han madurado. El ciclo de vida completo puede demorar entre 25 y 60 días dependiendo de la temperatura (óptima 25 °C). La vida de las obreras puede rondar los 4 a 12 meses. Los hormigueros se caracterizan por poseer más de una reina y obreras monomórficas (todas idénticas). Son omnívoras, aunque prefieren las sustancias azucaradas líquidas (secreciones de áfidos, miel, néctar, savia, etc.). Entre individuos de la misma colonia realizan trofalaxis. Mediante este mecanismo regurgitan el alimento alojado en el buche del tracto digestivo y alimentan a otras obreras, a las crías e inclusive la reina. Viven en el peri domicilio, paredes, cañerías, invadiendo ocasionalmente cuando necesitan agua o alimentos. Es la típica hormiga que aparece en la cocina cuándo queda pan, galletas o carne en el suelo o mesada. Se la suele ver en torno a los trapos húmedos de la cocina o directamente cerca de las canillas. A diferencia de la hormiga faraón (Monomorium faraonis), es raro ver a la hormiga argentina ingresando en las alacenas o azucarera. Básicamente se alimenta de deshechos o suciedad residual. Para su control es fundamental realizar barreras residuales externas e internas utilizando suspensiones concentradas base piretroides (Ej.: RUSTER, Deltametrina 2,5%) y la aplicación de cebos en gel de manera de lograr la eliminación de crías, obreras y las reinas. La eficacia del uso de cebos radica en el mecanismo de alimentación (trofalaxis).
